«Muchos
microrganismos se propagan a través de las superficies como pasamanos,
puertas, bolígrafos o monedas. La higiene de manos y la desinfección de
superficies es muy importante. No obstante, metales como el cobre con
propiedades antimicrobianas podrían ayudar a frenar la transmisión de
microorganismos capaces de provocar enfermedades infecciosas».